lunes, 21 de diciembre de 2015

POLITICA Y MULTINIVEL


Todos conocemos que es la política y quizás algunos conozcan el multinivel, que es un sistema de mercadeo utópico en el cual uno ingresa por algún integrante de la organización amigo o conocido nuestro. En este sistema nos encontraremos con esquemas generalmente piramidales en los cuales en teoría, uno cobra por las ventas propias y por las de los referidos o aquellos que ingresaron al sistema gracias a las personas que invitamos nosotros a que se sumen. Suena bien, cobras por tus ventas y traes otras 3 personas y cobras por las ventas de ellas. Ahora si ellas a su vez, traen otras 3 personas,  también vas cobrar por sus ventas. Siguiendo una progresión simple, te darás cuenta que en sólo 18 niveles cubrirías la mitad de la población mundial, un supino y total absurdo. Pero bueno, al igual que en política, ingresas porque te invita un afiliado, un amigo o un conocido y muchos también creen en cosas absurdas.

Alguna vez fui de curioso a una de estas reuniones de multinivel. Fui a una de HerbaLife. También, he participado y asistido en política y no de curioso sino por ideología, por  compromiso y por convicción a  asambleas y reuniones partidarias. Usualmente las empresas de multinivel, tienen una estructura de captación o hunting muy similar. Llegas al salón de un hotel, generalmente importante y allí se presenta un Sr, siempre sin excepción muy bien vestido y te cuenta la historia de alguien exitoso. ¡Pero, que parecido que es esto a las reuniones de campaña política! El hotel céntrico , el salón bien iluminado, el tipo importante que habla bien y siempre está bien trajeado, mmmm. Después resulta que, en las reuniones multinivel, aparece otro que es más parecido a cualquiera de nosotros un tipo común, que estaba sin laburo y entro a la empresa y hoy (según cuenta el mismo) vive a cuerpo de rey gracias a las ventajas de este maravilloso sistema. Y aquí esta otra similitud con la política, en una de esas reuniones partidarias, siempre aparece el compañero, camarada o correligionario que estaba en la lona y un amigo lo llamo para darle una mano, la política todo lo puede o al menos eso piensan algunos.

Cuáles son las formas de entrar en un sistema multinivel. Generalmente suele ser mediante la compra de tu primer stock de productos  y, en algunos casos, un fee de ingreso.  Esto generalmente,  termina con frustraciones y un stock de productos que te compra tu familia y amigos para darte una mano. Ahora bien ¿Quiénes son los que se llevan la porción grande de esta torta? Obviamente, los que te dan las charlas, arman las reuniones, sacan los anuncios en el diario, etc. En definitiva, los que armaron este circo. Un artículo interesante de la revista Forbes publicado en marzo de 2014  cuenta que la gran mayoría de los agentes termina perdiendo dinero, mientras sólo un 2% llega al tope del nivel de distribuidores consiguiendo ingresos por u$s 50.000. Parece  buen dinero, pero esta publicación es norteamericana, en donde este ingreso anual apenas te califica como clase media para nada acomodada. En 2014, el valor promedio para la clase media era de $ 44.000.

En política, generalmente también cuando ingresas terminas poniendo plata. Plata para viajar, que una vaquita para armar la reunión cuando viene al pueblo algún compañero, correligionario o camarada de Bs As (ni pienses que estos tipos que son diputados, van a poner un peso de su bolsillo) Pones tu auto para llevar y traer gente a votar y otros mil etcéteras. Y si, ya sabes muy bien quienes son los que se llevan la porción grande de esta torta. Ni vale la pena explicarlo.

También  hay una representación del “Oro y el Moro” Si, Karatbars, que aunque ellos juran que nos son un multinivel, lo hacen con justificaciones que lo que demuestran es que son otro tipo de multinivel. Estos venden gramos de oro. ¿Cómo te enganchan? Fácil, te pintan un escenario tipo  “Se viene la próxima crisis”, “el oro siempre fue una forma de conservar el valor”, etc. Lo que  se ve es que no están al tanto de la debacle de los últimos 3 años. Lo que si tiene es facha,  es que el oro que compras viene en pequeñas barras de 1 gramo empacadas en una cajita  similar a una tarjeta de crédito y su certificado de autenticidad. A diferencia de otros multiniveles, muchos se sienten tentados a dedicar más capital pensando que así, además de hacer dinero, ahorran en oro. Aquí sí cabe una diferencia, en lugar de hacer dinero por tus referidos como en otros sistemas, lo haces en comisiones vendiendo oro. Pero como vos también tenes que comprar oro para  calificar en otros niveles, ello conlleva a que tu equipo de ventas cobre comisiones. Y acá viene los del oro y el moro mientras el gramo de oro se encuentra hoy en día en u$s 34, comprarlos en Karatbars te costará u$s 60 más gastos de envío.

En política, el oro y el moro es moneda corriente, siempre te vas a encontrar a estos muchachos en ambos lados del mostrador, es decir vas a cerrar tu año fiscal, casualmente en apenas unos días y veras que los tenes de socios en un 35% de tus ingresos. Pero como no les alcanza para sus triquiñuelas, tendrás que aportar más. Aparte si queres tener una vida digna, tendrás que olvidarte de lo que pueda brindarte el estado y recurrir a pagar una prepaga si queres tener una buena atencion sanitaria, pagar peajes si queres circular por rutas en estado aceptable (mas allá de que pagues aparte del 35% 6 cuotas al año del impuesto automotor) Pagar la educación privada de tus hijos si lo que pretendes es que al menos tengan garantizados los 180 días al año de clases como mínimo, etc.
 
En fin, multinivel y política, dos opciones que nos son recomendables para nosotros, los mortales comunes.
Nota:
 

jueves, 17 de diciembre de 2015

Macri y el síndrome de Estocolmo.


El pasado 10 de diciembre, asumió un nuevo presidente y nunca más atinado el término “nuevo”. Pasaron 12 años de una administracion peronista o kirchnerista, o cristinista. En fin si una característica tiene el peronismo es que todos los que surgen se creen siempre mejores que los que se van, incluso mejores que Perón, su fundador de allí que cada uno toma su apellido y le da vida a un nuevo movimiento dentro del movimiento. Si es  una cosa muy rara pero a la que los argentinos ya estamos acostumbrados. En fin ha asumido un  nuevo gobierno, surgido de una fuerza política nueva, batida no revuelta, parafraseando a James Bond, con el radicalismo. Este nuevo gobierno a pocos días de haber asumido, ya ha nombrado a dos jueces de la Suprema Corte, sin pasar por el legislativo y esto que en otro momento hubiese sido un escándalo de proporciones astronómicas, hoy apenas si dio para un par de programas políticos y alguno que otro copete de los diarios principales. Por supuesto las lides del gobierno saliente, se rasgaron sus vestiduras y flagelándose el pecho y la espalda fueron desangrándose a los habituales programas de culto a sostener este flagrante atropello a las instituciones, algo que  por cierto, ellos hicieron durante 12 años. Pero bueno, días mas tarde se liberó el tipo de cambio para la moneda extranjera de referencia, el dólar y esto tapa lo otro así que nada, ya se encamino hacia el olvido y fundidos en un abrazo entre canallas, Macri y Lorenzetti pactaron las juras de estos nuevos jueces para el mes de febrero, donde todos estamos al sol como iguanas con protector solar 50, mirando las olas y dejando que nos lleven puestos como sucede siempre entre diciembre y marzo. Lo cierto es que se nos avecina una devaluación de nuestra moneda, una más en nuestra historia que desde Ongania para acá debe ser como la numero 300. Pero si no fuera porque, como dice Groucho "Hay muchas cosas en la vida más importantes que el dinero. ¡Pero cuestan tanto!" no tendríamos que preocuparnos, ¡Pero tenemos que hacerlo! Ya que además laburar no es lindo sino pregúntenle a los acólitos kirchneristas que estuvieron 12 años con las manos en el bolsillo y ellos pueden hasta dar la cátedra del ñoqui, algo que ya pergeñaba Forster si seguían en el gobierno en su ministerio para el pensamiento nacional. Y si encima de laburar, lo que cobras vale 40% menos, estamos realmente en un problema. El nuevo gobierno lleva poco, poquísimo tiempo apenas días en su mandato, pero ya se perfila en la opinión publica una suerte de síndrome de Estocolmo, por el cual por más que nos aprieten las tarlipes con una morsa de banco, todos sonríen de oreja a oreja viendo como el pulcro presidente y su impoluta primera dama saludan desde el estudio de Susana Gimenez.

 

miércoles, 16 de diciembre de 2015

Cuando me vaya

Me llevare más de lo que traje

O dejare las cosas con las que vine

Las sombras alargadas de un atardecer

El influjo del mar en su incansable repetición

Las calles del mundo bajo mis pies
 

Un lugar de pertenencia, un lugar de extranjero

Las banderas enarboladas y la ideología absurda

El amor entrañable, el inolvidable y el presente feliz

La búsqueda, el encuentro y el olvido

El susurro delicado y el contacto de la piel tibia
 

La  incertidumbre adolescente

El desenfreno visceral del sexo

El impulso incontrolable y  pasional de la juventud

La calma y la paz de la madurez

El inexorable paso del tiempo y los que ya no están
 

¿Me iré sin mirar atrás?

¿O tal vez las cadenas del apego no me suelten?